¿Cuánto te costará cambiar de hipoteca variable a fija?
El Euribor sigue subiendo, y esto, tiene consecuencias negativas en el coste de las hipotecas a tipo variable. Ha pasado de -0,499% en enero de 2022 a un ascenso brusco de 2,83% registrado a finales del mes de noviembre.
Teniendo en cuenta la situación actual, muchos deciden cambiar su hipoteca variable a una hipoteca fija. Pero antes de tomar cualquier decisión, es importante informarse y valorar todas las opciones. Si decides, finalmente realizar el cambio existen dos opciones, la novación o la subrogación.
¿En qué consiste la novación?
La novación es un cambio de condiciones del contrato con la entidad financiera. En este caso, se suele estipular el abono de una comisión que puede alcanzar el 2% sobre la cantidad adelantada durante los 10 primeros años y el 1,5% sobre la precitada cantidad durante el resto del plazo. En cambio, esta comisión en operaciones a tipo variable no se puede estipular pasados los primeros tres o cinco años; además, en este período no puede superar:
- Durante los primeros tres años del préstamo, el 0,25% sobre la cantidad adelantada.
- O bien, durante los primeros cinco años del préstamo, el 0,15% sobre la cantidad adelantada.
¿En qué consiste la subrogación?
La subrogación, en cambio, supone llevar el préstamo hipotecario a otra entidad, y en este caso, los gastos suelen ser superiores a los de la novación y estarán especificados en el contrato de préstamo original, con un límite legal máximo del 2%.
Es importante saber también que la entidad financiera puede aplicar una comisión por compensación por riesgo de tipo de interés cuando la cancelación o la amortización anticipada produce una pérdida financiera al banco. A estos efectos, existe pérdida financiera cuando los tipos de interés en el momento de la cancelación sean inferiores a los que esté liquidando el préstamo. En estos momentos, esta comisión ronda el 4%:
- Si firmas hoy una operación al 4% y dentro de cinco años quieres cancelar y los tipos están al 3%, se le aplicará la comisión por la cancelación, que puede oscilar entre el 1 y el 5% de la suma amortizada.
En cualquier caso, es importante tomarse tiempo, estudiar la situación y tener en cuenta todas las variables.